Pinceladas de Pretemporada
14 Agosto 2015
Victor Lafuente
Cada pretemporada nos afanamos en discernir nuevas características que nos ayuden a clasificar a cada equipo, con el objetivo de autogenerarnos una seguridad que no es tal, ya que lo sometido a incertidumbre genera multiplicidad de respuestas siendo incontrolable el conocimiento de una producción puntual.
El primer paso es conocer los principios sobre los que se asienta cada equipo, en el caso del Bilbao Athletic los principios no pueden sufrir grandes cambios, ya que estos nacen de entre las relaciones entre jugadores y la composición de la plantilla no ha sufrido grandes alteraciones.
Marcelo Bielsa: «Nadie estimula condiciones que no existen y nadie activa potenciales que el ser humano no tiene»
Oscar Cano: » El modelo nace de las interacciones entre jugadores»
Por tanto el jugar producido por las interacciones nacientes de entre los jugadores no puede ser muy distinto, dentro de una plantilla que no ha sufrido variaciones significativas.
En pretemporada hemos visto como el equipo de Ziganda trata de ajustar sus distancias cuando no es poseedor, convirtiéndose en un bloque más estrecho y corto que el del año pasado, que dificulte las relaciones interiores del rival y obligue a explorar caminos secundarios como ejes de penetración hacia portería, si la circulación del rival no lo impide la línea defensiva se erige sobre medio campo, solo reculando ante progresión rival, reduciendo notablemente el espacio al rival, y permitiendo estructurar al equipo en 25 m de largo, generar densidad central que posteriormente se traslade sobre espacios laterales aplicando ventajas numéricas con la basculación del medio centro.
La apuesta parece todavía más decidida por ser un equipo muy agresivo sin balón, que dificulte la tenencia al rival y que recupere la pelota con premura, permitiéndole escenarios ventajosos con la misma.
Con pelota la idea es similar a lo propuesto durante la campaña pasada, avanzar sin saltar fases constructivas, a través de las ventajas posibilitadas por la primera línea de intervinientes, para ellos a la buena interpretación de los centrales, Undabarrena, Bengoa, Iturraspe, se le suma un futbolista con excelso manejo de la generación de ventajas convertido en un benefactor para todos aquellos situados en su radio de acción, como es Unai Lopez. Estructuralmente las referencias espaciales significativas son similares, con distancias de relación adecuadas que permiten erigir distintos trayectos en el modo de abordar la progresión en el juego y facilitarle la toma de decisiones al compañero provisto de balón.
