Los Williams por el mundo
A las puertas de una nueva edición de un Mundial de fútbol, al Athletic se le abre una ventana de seguir creciendo como institución.
Las historias inéditas merecen ser contadas. En el fútbol, de forma concreta, el periodismo deportivo se encarga de ser un megáfono para aquellos relatos que muestran la “cara B” del deporte rey. Están apareciendo noticias, reportajes o documentales de los temas extradeportivos que envuelven el Mundial de Qatar y están sirviendo para denunciar los hechos de forma significativa. Entre aquellos cuentos que se están haciendo populares, podemos encontrar el de los hermanos Williams, Iñaki y Nico. Medios de comunicación como 433, Panenka, Marca… han entrevistado o generado contenido relacionado con ellos. Juntando el gran impacto que genera una Copa del Mundo y la novedad del “fenómeno Williams” como hermanos y rivales en el mismo torneo, el panorama internacional que le queda al Athletic Club en bandeja es más que relevante. Y va más allá de la renovación de Nico Williams, que termina contrato en 2024 y es importante la necesidad de mantener a un jugador como él.
En un mundo postmoderno, el fútbol ha vivido muchos cambios. Antes, llamaban la atención los Pirlo o Zidane. A día de hoy, los perfiles que más gustan entre los más jóvenes son Mbappé o Neymar. Jugadores fantasiosos, mágicos, explosivos, habilidosos. La sociedad y el fútbol evolucionan cogidos de la mano, y los ‘highlights’ destacan por encima del resto. Mola más un TikTok de una jugada ‘maradoniana’ de Vinicius Jr. que un vídeo de 15 minutos mostrando acciones de pase de Xabi Alonso. Por ello, la irrupción de Iñaki y Nico Williams en los debates futbolísticos ha sido notoria. El mayor, por su destacada velocidad y capacidad de superar rivales con dos zancadas, y el menor, por su capacidad de regatear, su ‘1 vs 1’.
En ese aspecto, el Athletic nunca había tenido jugadores que destacasen más en la ‘Playstation’ que en la realidad. Los extremos de Lezama, históricamente, han sido más técnicos (Etxeberria, Yeste, Susaeta, Ibai Gómez…). Los Williams son veloces, regatean y generan los ‘oh’ del público. Y ese hecho, para el Athletic, es una gran oportunidad para destacar por encima del resto como club. Es el momento de explotar la “marca Athletic” a través de dos jugadores de Lezama que llaman la atención a todo el mundo del fútbol.
Son varios los motivos que generan esa necesidad. Se ha transmitido una parte de debilidad en la situación económica del club. La pandemia y ciertos aspectos de anteriores gestiones han marcado pérdidas en la economía del Athletic. De hecho, se ha llegado a un acuerdo con la empresa DIGI para las próximas dos campañas para ser un sponsor más en la camiseta de los rojiblancos. Desde la actual junta, se están buscando diferentes formas de buscar ingresos, y la historia de Iñaki y Nico Williams es una ocasión de oro para hacerlo. Generar contenido en redes sociales, humanizar su relación, mostrar sus ‘highlights’ y otros vídeos… todo permite vender más camisetas y otro tipo de merchandising. Por otro lado, ese tipo de acciones te hacen dejar huella y llegar a los amantes del fútbol. Que los niños sustituyan a Vinicius por Nico Williams como el jugador al que se quieren parecer.
Crecer a nivel social es vital para una institución como el Athletic. El club tiene argumentos más que suficientes para hacerlo, empezando por su particular relato: filosofía, Lezama, arraigo con sus orígenes, historia, Bizkaia. Los hermanos Williams representan todo este conjunto de valores. Ahí, el Athletic tiene que hacer de su propio medio de comunicación para aprovechar el impacto de un Mundial que le permita seguir avanzando fuera de los terrenos de juego.