La problemática del fútbol escolar (Parte I)
6 Diciembre 2013
Asier Sánchez | @asier_sanchez
Después de más de un mes de competición, han saltado todas las alarmas en el fútbol bizkaino. Lo que era una tendencia que venía aumentando su relevancia año tras año ha terminado por explotar en la presente temporada. Las diferencias aumentan junto con el crecimiento de equipos inscritos en la liga de mayor competencia, la llamada “Liga E”, que a la vez que ve como alguno de sus equipos aumentan su tecnificación y nivel año tras año, observa también como entran en ella una serie de equipos que no están preparados para afrontar la exigencia deportiva y psicológica que supone este tipo de competición.
Recordamos que, aunque sea fútbol, estamos hablando de niños, de jugadores de fútbol en edades tempranas y en el que es casi su primer escalón formativo. Debemos analizar este artículo y los datos que en él se incluyen, así como las consecuencias de lo que sucede en esta temporada, teniendo en cuenta que los protagonistas son sólo niños.
Para tomar como referencia una categoría y un año, utilizaremos los datos correspondientes a la categoría Alevín de 2º año, competición “Liga E”, con el fin de poder extraer una referencia rápida del problema, sin entrar a excesivos detalles. Eso sí, se debe tener en cuenta que lo mismo que sucede en este año concreto se da en la categoría Alevín en sus grupos de primer año, en su nivel “Liga A” en alguno de sus grupos. Se repiten también los datos estadísticos, con variaciones pequeñas, en Infantiles de primer y segundo año, también en referencia a la “Liga E”.
Organización de competición
Hace ya varias temporadas, la Diputación Foral de Bizkaia se hizo con las riendas del deporte escolar en la provincia. Se hizo con el control y se encargó de la gestión de todas las modalidades deportivas generales que existen en el territorio y las regularizó. A tener en cuenta que, estadísticamente y teniendo en cuenta el número de habitantes en edad escolar, Bizkaia es una de las provincias de todo el territorio nacional en la que más niños practican deporte.
Como una de las disciplinas deportivas comunes, el fútbol fue incluido dentro de este apartado y se cambió el modelo de competición para “desfederarlo”. Desde entonces, y siendo una de las únicas provincias dentro del marco del CSD que lo hace, Bizkaia dejó de tener deporte federado en benjamines, alevines e infantiles. También en etapas anteriores, donde no existe por hoy regulación en el territorio vizcaíno (prebenjamines).
Estas tres categorías de edad (al igual que la de prebenjamines en algunos casos), son categorías federadas en la gran mayoría del resto de provincias y la gestión, administración y control pertenece a las federaciones provinciales o autonómicas de fútbol. Eso sí, en todos los casos se dispone una legislación específica y un control adicional al que se hace en cadetes, juveniles y senior en todas las administraciones comunitarias.
Desde aquella decisión, Bizkaia mantiene en fútbol el siguiente formato:
- BENJAMINES:
- Liga A y B
* Las dos “categorías” pertenecen a lo que la Diputación denomina “Itinerario de Participación Deportiva”
- ALEVINES:
- Ligas E, A y B
- INFANTILES:
- Ligas E, A y B
En el caso de infantiles y alevines, la Diputación establece que la categoría “E” pertenece al “Itinerario de Iniciación al Rendimiento”, estableciendo que las categorías A y B pertenecen al ámbito de la participación, aunque exista diferencia de nivel entre ellas.
La inscripción en cualquiera de las tres categorías es libre para los clubes del territorio, siempre que cumplan con los requisitos de participación y origen de sus participantes. Por tanto, depende de la dirección de un club decidir en qué categoría competirá la siguiente temporada cada uno de sus equipos, aun no conociendo, en muchos casos, el nivel del resto de equipos que formarán parte de la categoría. Tampoco se conoce el número de equipos que participarán en cada nivel competitivo hasta la finalización del periodo de inscripción.
Desaparecía así el común formato de promoción y descenso de competiciones (subir y bajar) existente antes en la provincia y existente hoy día en muchas de las comunidades.
En lo referente a partidos y en etapa alevín, los partidos constan de tres tiempos de duración. Juegan un total de siete jugadores sobre campo, incluyendo portero (modalidad fútbol siete). Los jugadores que no hayan participado en la primera parte deberán hacerlo en la segunda. En el tercer tiempo se permiten cambios libres y que haya jugadores que no participen en este último tiempo. Por tanto, todos los jugadores deben jugar, al menos, veinte minutos. En los dos primeros tiempos no existe posibilidad de sustitución, excepto por lesión o causas de fuerza mayor.
Tendencia
Hablamos a partir de ahora sólo a lo que la “Liga E” se refiere. En los primeros años en los que funcionó este modelo, el número de equipos que participaban en la máxima de las categorías por nivel no fue alto. Siempre la lista quedaba cerrada con los equipos que tradicionalmente habían sido punteros en el modelo anterior, equipos con mayor “tradición”.
El número de entidades deportivas, tanto en referencia a clubes como apartados de deporte dentro de los centros escolares, ha ido aumentando en los últimos años. También ha ido aumentando el número de equipos que forman parte de las Ligas E, hasta llegar a récords.
En la presente temporada, refiriéndonos a la categoría y año que queremos tratar (2º año alevín, Liga E), el número total de equipos inscritos asciende a veinticuatro, siendo uno de los años con más equipos que se recuerdan.
Ahora, entran en Liga E un grupo nuevo de entidades que antes no tenían presencia: entidades nuevas que han apostado con fuerza por el fútbol formativo o apartados dentro de clubes con tradición formativa que no se ocupaban del fútbol escolar; y equipos pertenecientes a escuelas deportivas de colegios.
Jugadores
El número de jugadores que forman los equipos de Liga E está en torno a los doce integrantes. Actualmente, con el fin de aumentar el nivel, existe una tendencia que reduce el número de jugadores para aumentar el número de minutos disputados por cada uno de los jugadores y conseguir que el nivel sea así lo más alto y homogéneo posible. Es un modelo que utiliza el Athletic Club a día de hoy, con equipos “cortos”.
Los jugadores, a excepción del Athletic y otras solicitudes puntuales que deben ser aprobadas, deben pertenecer al entorno donde reside el jugador. Aun así, existen temporada a temporada cambios de jugadores entre equipos. En la provincia de Gipuzkoa existe actualmente un problema importante respecto a este aspecto que ha enturbiado la relación entre varios clubes.