El baby Athletic vuelve a plantarse en semifinales
El baby Athletic vuelve a plantarse en semifinales
Con una tarde bastante desapacible, en lo meteorológico, el calor lo pusieron los innumerables athleticzales que se acercaron a Lezama ver el partido entre el Athletic y el UD Costa Adeje Tenerife con el objetivo de buscar el billete a las semifinales de la Copa de la Reina.
Los primeros compases del partido fueron bastantes tranquilos, sin peligros aparentes, hasta que en el minuto 10 Elexpuru rompió el marcador con una veloz internada hasta plantarse delante de la guardameta y superarla con una exquisita picada. El Athletic tenía el partido bastante controlado y con ocasiones para aumentar la renta. Pero, para añadir un poco de picante, en el minuto 23, un saque de esquina terminó dentro de la red tras un cabezazo imperial de Patri. Aun así, las rojiblancas continuaron asediando el área contraria con numerosos remates de Azkona y un disparo desde fuera del área de Clara. Las locales perdonaron demasiadas ocasiones.
Después del descanso, ambos conjuntos volvieron con la misma intensidad y ritmo con el que terminó la primera parte. Las rojiblancas, recibieron el primer susto de la segunda parte cuando Maite Zubieta se hizo daño en el tobillo y en primera instancia parecía no poder continuar el choque al salir del campo con una gran cojera. Por suerte, todo quedó en un susto y pudo seguir. Aun así fue el equipo de Jose Herrera quien le metió una marcha más y es por ello que una de las protagonistas fue Nanclares con sus enormes intervenciones que mantuvieron al equipo en el partido. La primera de ellas, cerca de la primera hora de partido, donde gracias a sus reflejos y el palo, evitaron que por centímetros el rival se adelantase.
En el tiempo de prolongación, no hubo ninguna acción de peligro por parte de ningún equipo, salvo la expulsión de Itxaso en el 110”, cuando en un lance con el balón, la colegiada entendió que la jugadora rojiblanca no tocó balón si no la pierna de la rival y por ende le sacó la segunda amarilla. Aun así, el equipo supo resistir los últimos 10 minutos con 10 futbolistas.
No fueron suficientes los 90 minutos de tiempo reglamentario y los 30 de prórroga, el choque se tuvo que decidir desde los 11 metros. No 1, ni 2, ni 3 penaltis se lanzaron, sino 18, y nuevamente la protagonista fue Nanclares, que realizó 3 paradas pero, fue Irene Oguiza, que estuvo 8 meses fuera de los terrenos de juego recuperándose de la lesión de rodilla, la que puso la guinda metiendo el último penalti y dando el pase a semifinales al equipo de su vida.