AGOSTO SE FUE QUEMANDO

3 Septiembre 2013

Juanma Velasco | BILBAO

Perdió el Athletic en el Bernabéu. Allí se dejó los puntos de costumbre y no pudo reencontrarse con esa victoria que conquistó en la primera etapa de Valverde al frente del banquillo rojiblanco. Los puntos dolieron igual que la sensación de no poder hacer daño al rival. Pero por encima de todo dolió el extraño fin de semana vivido alrededor de Ander Herrera, que ha estado bailando con el United. A un paso de ir más allá y convertir el coqueteo en un amor estable. Herrera, que estuvo en el banquillo y se quedó sin minutos frente al Real Madrid, no es jugador del Manchester United por el canto de un euro. El ManU lo quería para regenerar un proyecto huérfano desde la marcha de Ferguson y sin la capacidad de liderazgo de Rooney y da la sensación de que Herrera ha estado muy cerca de los diablos rojos.

El ex jugador del Zaragoza, titular para Valverde en las dos primeras jornadas de Liga, ha estado a punto de ligar su corazón a Old Trafford, porque a nadie se le escapa que el United y el futbolista habían alcanzado un acuerdo condicionado. De lo contrario, por prepotente y adinerado que se pueda considerar a uno, no hay persona, ni club en el mundo capaz de hacer una oferta por alguien que no sabes muy bien por dónde respirará. El United se la jugó a que el Athletic podría aceptar una salida pactada (sin IVAs ni tasas) y se encontró con una negativa por respuesta. Y Herrera, con el que el United tenía cerrado un principio de acuerdo, ha visto como el tren de la Premier, de momento, ha pasado tan cerca que le ha hecho tambalearse.

Herrera, que es un tipo reflexivo, estará dando vueltas a su próxima comparecencia de prensa. Tendrá que explicar cómo le van las pulsaciones después de haber estado a un paso de cambiar de aires. Lo que diga, en realidad, importará poco porque el United le ha puesto en un brete por eso de que no hay club en el mundo que vaya a por nadie sin sentirse seguro de que a la hora de la verdad el futbolista dará el paso de firmar. Y Herrera, por lo que cuentan desde el norte de Inglaterra, estaba convencido.

Así que agosto se ha ido quemando. No tan fuerte como el del año pasado, pero dejando a más de uno escaldado. Lo bueno que tiene esta película futbolística es que Herrera tiene carrera por delante para demostrar que lo suyo es hacer carrera en el Athletic y que lo vivido con el Manchester no ha sido más que un desliz con una chica con tacones que te saca cabeza y media y que está acostumbrada a rodarse de chicos anuncio. Para eso y para acallar todas las informaciones, opiniones y rumores y que saldrán cada día sobre su futuro: y es que a la vez que se asimilaba la oferta del United, ya había quién defendía que el padre del jugador y Andoni Zubizarreta se han reunido para sentar las bases de un próximo futuro juntos. ¡Qué bien que ha llegado septiembre!